domingo, 29 de junio de 2008

Ya hay amaneceres y puestas de sol.
Ya hay cielo nocturno con festival estelar cuasi perpetuo.
Ya hay vida.
Desapareció la sensación de asfixia.
Una pequeña pausa sin zorros ni corderos de corte manso y de espíritu viperino.
Sólo el azul del cielo y del agua dulce, clorada o no.
Sin mástiles, ni cabos.
Por un momento.

Y sin embargo siento una pequeña desazón, como si me hubiera dejado algo, como si te hubiera dejado.

4 comentarios:

ETDN dijo...

También ha llegado el verano para ti, veo. Disfrútalo. Y no mires atrás. Siempre digo que, en realidad, el año empieza en septiembre y no en enero. Borrón y cuenta nueva, que el mar se lleve lo que no merecía quedarse.

Como dice una canción de Mikel Erentxun: "cuando mi contestador esté vacío de gente que no me amó"... Pues eso: hay pérdidas que en realidad son ganancias, aunque cueste darse cuenta.

Me gustaría conocer tu historia, algún día ;P

besos y buen verano

eldiaridekafka dijo...

Imaginación al poder...

No hay mucha historia, quizás esta piscis de secano utiliza demasiados recursos estilísticos ;).

Q descanses.

__ dijo...

Ha sido un invierno duro. Lo malo es que cada vez son peores.

Tendremos que buscar como sacudirmos el tópico y disfrutar del frío y de la lluvia, ya que nos depara momentos maravillosos que tenemos que hacer inolvidables.

En cualquier caso, bienvenido sea el verano y a dejarse llevar...

Todos tenemos una historia, Ignacio

eldiaridekafka dijo...

Me da la sensación, Ignacio, que ya ni hay primavera ni otoño, directo del invierno al verano y viceversa. No da tiempo a aclimatarse. Hace dos semanas llevaba una chaquetita de lana y paraguas y ahora faldita y chanclas. El mundo está loco, loco, loco...

A disfrutar como se pueda de los 40º.

PD: todos tenemos una historia, si no, qué aburrida sería la vida.