lunes, 28 de abril de 2008

Mañana



Sería absurdo pensar que no habrá un mañana aunque fuera cierto, porque el mañana pueda que nunca ocurra. Y que lo estemos esperando, como el autobús de las siete que lleva al aeropuerto y que nunca llegó, por lo que perdiste el avión que te llevaba al día siguiente.
Pero aunque eso sucediera, habría valido la pena el tiempo gastado, ¿verdad? Con sus horas muertas y sus ratos plenos, con las horas vividas y las dormidas.
Y sin embargo aún falta para que el mañana no llegue.

Y te digo todo esto mientras duermes en mi regazo y acaricio con mi mano tu mejilla derecha, mientras sueñas en mañana, sin preocuparte en si despertarás o no,
mientras detengo el tiempo y observo cómo respiras con tranquilidad, pausadamente,

saturando al noventayochoporciento con fíodos al veintiuno.

PD: sé que mañana despertarás y seré yo entonces quien apoye la cabeza sobre tu regazo
y serás tú quien me acaricie mientras duerma, ¿verdad?.

No hay comentarios: